domingo, 25 de mayo de 2008



Amigos, agregué a los link del lado derecho el de la comunidad Saltapura, que queda a 16 Km al sur de Nueva imperial. Este blog lo realiza el poeta y profesor Erwin Quintupill. Se recogen ahí epew, poemas, vivencias, historias y relatos de la comunidad en cuestión. Es un hermoso trabajo y por eso les recomiendo que los visiten y lean.

Para todos aquellos que aprecian la memoria de nuestro pueblo mapuche (recordemos la máxima de Rimbaud: "yo es otro". Nosotros somos los otros. Los otros son también esto que llamamos "yo").

http://trawunsaltapura.blogia.com/

(escultura de Lino Ranguileo, de la comunidad Saltapura)

miércoles, 21 de mayo de 2008

Folilche Aflaiai





Gracias al archivo gótico musical (ver los enlaces) por este hermoso disco.

Según la información que ahí publicó su administrador, este disco no pertenece a un conjunto en particular, sino que es de una ONG que grabó estas canciones y que, al parecer, han grabado varios discos.

Esto es muy entendible en cuanto, para el mapuche (o para muchos mapuches, de la gran heterogeneidad que son), la música es algo ligado a su cotidianeidad y a sus ritos, por lo mismo, se entiende que la música es "de la comunidad" y para ella, o para otros. No está en ellos nuestra concepción de la industria ni de lo que es un "concierto", por decirlo así. Los conciertos son los ritos mismos.
Bueno, lo poco que puedo agregar como comentario sobre este disco es que, al menos a mí, me pasó que logré disfrutar la música mapuche en el contacto con la comunidad (con una comunidad en específico, de la cual mucho aprendí y aprendo), como un aspecto más de su profunda cultura y hermosa cultura, pero siempre ligada a un aspecto ceremonial, ritual, o celebratorio. En ese sentido, escuchar este disco, para un "no mapuche" (concepto que es discutible en todo chileno) me parece que equivale a sentir un rito, un rito con la tierra, la naturaleza, en uno mismo, con uno mismo y con los otros. No se trata de que tengas que irte a la punta de un cerro o a Temuco para escuchar el disco, sino de que oír cierta música puede convertirse en un ritual, estés donde estés. Pues bien, para mí, oír este disco requiere de un acercamiento a eso que el mapuche considera sagrado: la naturaleza, los ciclos de ella, la tierra, sus seres vivos, los árboles... Cosas que están en todas partes. Ahí es cuando empiezas a moverte al monótono e hipnotizante ritmo de esta música.




domingo, 18 de mayo de 2008

Voz Propia - No Puedo Irme (1988)













Otra de las buenas bandas que conocí gracias a Marko Gélido -del blog peruvian conecction-. Voz Propia es un grupo con una tremenda historia en Perú. La verdad, es que creo que no soy yo el más indicado para hablar del grupo, por eso los dejo aquí con una introducción a su historia aparecida en su página web:

La urbe, la ciudad con sus múltiples problemas y oportunidades con su geografía tan particular y sus diferencias sociales abismales, donde existen cubos de basura con algunas flores adentro tanto arriba como abajo , y por supuesto: “sueños”, de aquellos de los que esta hecha la historia, y esta historia tiene que ver con la música, específicamente con el rock and roll, con aquel que habla de las calles y del corazón que las ve, sumamos a esto algunas fechas importantes para pintar el contexto: dos gobiernos militares, los rezagos de los años sesenta que nuestros amigos o hermanos mayores absorbieron, el movimiento Punk, el mundo político de los ochenta el terrorismo, y el rock hecho en el Perú, agreguemos algo de creatividad y pasión y aparecerá VOZ PROPIA.

Aunque el Rock Subterráneo ya tenia antecedentes desde el año 1984 VOZ PROPIA tiene una historia paralela y muy particular ya que VOZ PROPIA no sigue con los estereotipos del mundo “subte”, a pesar de tener entre otras influencias a un grupo como
NARCOSIS, de ahí el nombre tan particular, las letras y su música.
Este disco que les dejo salió el año 1988. Es el segundo de la banda y, a mí gusto (y para Marko tb), uno de los mejores. Un sonido que podemos asociar con la etapa más primigenia del post punk, porque la música se mueve constantemente entre un punk rockanrolero y un sonido oscuro, perfectamente denso en sus dos facetas, pero no por eso necesariamente difícil, experimental sólo hasta cierto punto. Apasionado, siempre (más que bien ejecutado o bien grabado, a pesar de que no suena mal), con algunos temas totalmente febriles, otros más calmados (la tormenta), de letras introspectivas, metáforas muy simples, crípticas a ratos, y totalmente directas, contestatarias en otros temas, incluso divertidas. En fin, hya mucho que descubrir en Voz Propia, chicos. Hay mucho que descubrir en el rock peruano, en su historia, sus artes actuales y más viejas. Empecemos por la simpleza del sucio rock.

http://www.mediafire.com/?l37ixnxbw2y (parte 2)





jueves, 15 de mayo de 2008

La Dolce Vita - Con el corazón en la boca




Por el año 95 salió el primer disco de la Dolce Vita. Una banda de principios de los noventa por la que pasó como vocalista Pablo Ugarte un tiempo. Recuerdo que en el Vía X (canal de música que cada día se parece más a MTV, para desgracia de todos) pasaban el video "Amor a la Mala".

La Dolce pasó a ser de la camada de bandas de la EMI que duró más o menos un candy en el sello, que vendió más bien poco y que, con el transcurrir de los años, empezaron a desaparecer. En el camino de la recepción social, el grupo se hizo parte de un grupo -pequeño- de bandas punk no callejero, un punk muy crítico en cuanto a lo social, pero también con un cierto sentir melancólico, más ligado a lo íntimo. Sus letras hacían , en ese primer disco, el camino de la violencia y el vació cultural -social hacia el interior

("faltan heroes de sangre ardiente/sobran viejos indencentes/oportunistas, neofacistas/ uno que otro comunista -a todos tengo en la lista...")

(los autos pasan como pasa mi destino, siempre pasan con la misma prisa)

Se mostraban lejos del punk de 2 minutos o Flema, porque sus canciones no te daban ganas de cantarlas en el estadio, ni tampoco en fiestas. Quizás por ese sentido más bien introvertido fue que la banda no tuvo facilidad en salir a un público. Aunque es claro que la constancia para "hacer" este público no se le dio, o no se trabajo lo suficiente por parte del grupo.

En su caso, la desaparición de la escena siempre fue mediana, porque se sabía que la banda aún funcionaba, aún tocaban en algunos locales por aquí y por allá, pero no con constancia. Incluso editaron un single que tuvo un video autogestionado (Quiero Sol).

Hasta que en el 2000 se editó este El Corazón en la Boca. Disco que muestra el lado más punky del grupo. El disco está muy bien producido, es muy intenso y rockanrolero. Deja de lado ese sector más bien intimista de la banda. Se puede escuchar de una pasada como una inyección de batería acelerada, guitarras, bajo y la voz (suave y gritona) de Pierre. Tiene tres covers de temas clásicos (en el tiempo estaba muy de moda hacer estos covers rápidos de temas más o menos tradicionales). A mi parecer, es un buen disco, pero que escasea, en sus viente minutos de duración, de la complejidad lírica y musical de la primera entrega. Al menos yo, me quedé extrañando una parte del grupo (que quizás se fue junto a la bajista).

Yo, al menos, me tomé este disco como el anuncio del retorno del grupo. Cuando termino de oír El Corazón... se me queda la impresión de que faltó algo por decir, algo por oír. Lamentablemente, la banda se disolvió sin ningún bombo ni platillo y quedó sumida casi totalmente en el olvido.

Va entonces, este homenaje, al rock que entrega lo que puede, y se sume en un misterioso silencio.

http://www.mediafire.com/?bct039110jl

domingo, 4 de mayo de 2008

Dolores Delirio - Cero


Mi amigo a la distancia, Marko Gélido, me hizo conocer a Dolores Delirio. Una de las bandas peruanas más importantes del dark pop de Perú, si no es que derechamente la más importante. Su carrera se extendió por toda la década de los noventa y se separaron los primeros años de esta década, si no me equivoco.

Conocí a esta banda gracias a Marko, junto a otras como Voz Propia o Lima 13, todas ellas con público acérrimo en Perú, con una carga importante de la historia del rock en nuestro país vecino, cosas notorias no gracias a libros ni a difusión mediática, sino a críticas de fans.

En particular, Dolores Delirio sacó unos cuatro o cinco discos de estudio, fueron conocidos fuera de su país, llenaron estadios en Perú, salieron en el tributo latinoamericano a The Cure, entre otros hitos de la banda. Escribo estas cosas e intento imaginar que, en los noventa, los jóvenes del norte de este país escuchaban a la banda, vibraban con ella, y no deja de parecerme extraño que acá no haya sido conocida, así como muchas otras bandas de Perú, de Brasil, de Colombia quizás -¿hay rock en Colombia?- . En fin, mi ignorancia me deja lugar para imaginar una adolescencia oyendo bandas en español sudamericano. No es que las europeas sean malas. Es sólo que pienso que cierta música puede entrar o no entrar a tu vida. Y me parece innegable lo determinante que puede ser conocer a una banda en algún período de la misma, y de ahí la importancia de la difusión. Por último, la opción de haber conocido a estas bandas debió haber estado. En fin. No más lamento por ahora.

Este disco, Cero, me llamó la atención por dos cosas. Primero, porque hace una buena digestión y variación del pop cureano, y de otras bandas post punk inglesas o gringas, en muchos pasajes que hacen el disco muy agradable y sugestivo, quizás algo comercial a ratos, pero bien compensado con ambientes, y con momentos nada predecibles. De que hay espacio para la sorpresa, lo hay. A ratos uno piensa que la banda va a sonar como Soda Stereo, pero, gracias a Dios, es un engaño, y las notas de la guitarra empiezan a alargarse, a dilatarse, y se convierten, en temas como Carmen, en riffs bastante pesados, de hecho.

Lo segundo, es la identificación con una forma de ser, con un carácter, en ciertas líricas. Es cierto que hay bastantes bandas que hicieron y aún hacen una aceptable reinvención del viejo post punk. En Dolores Delirio esto es así. Pero ¿por qué esta banda resaltó de entre otras en un género en el que hay ya bastante copia?

Yo intuyo que la respuesta va por las mencionadas líricas. Porque, cuando en la angustiosa canción Aprendizaje se canta:

Enséñame más allá del pequeño horizonte que veo.
Sabes bien que vuelo bajito para no hacer ruido
para que no sepas que soy tímido

se alude a una forma de ser, o quizás a un trauma, en el que nos podemos leer muchos sudamericanos, chilenos o peruanos. No sé por qué, quizás un sociólogo o sicólogo lo pueda decir. El asunto es que hay pasajes directos que me parece tocan más allá de las depresiones adolescentes. En el tema ¿No ves el sol?

ganaste el tiempo que suelo perder
también el dinero que nunca tendré
y te encuentras sin reconocerme…
mira mis manos, soy sólo un pintor…

mira estas flores en el desierto
mira estos niños bañados en barro
somos tú y yo

Me recuerda a Y no me digas pobre por ir viajando así. En este tema que llama a mirar el mundo interior. Aquí el pop de Delirio se aleja de la esfera metafísica existencial que suelen tener muchas bandas post punk, y por lo cual suelen cansar, para mostrar una existencia aterrizada en nuestras desigualdades sociales, con sus bajezas y su magia -siempre triunfante para quien ama el arte-.

En fin, espero que a otros también les de felicidad encontrar respuestas, a cosas que parecen difíciles, en simples canciones.

(agradecimientos infinitos, Marko)

La Lluvia y Joy Division

por Javier Zapata

La lluvia y Joy Division. A propósito de "Contol" el film de Anton Corbin sobre la vida de Ian Curtis.

Recco, Italia, son las 4:15 am. y estoy trabajando en la recepción de un Hotel. Mato el tiempo viendo videos en youtube y si miro por la ventana se ve parte del Golfo Paradiso. El mediterráneo esta más sinuoso que de costumbre, es de noche y afuera llueve.

Casi por reflejo escribo en el buscador, Joy Division y me pongo a ver videos de pequeños conciertos, en locales no más grandes que el Sindicato de Estibadores en Valparaíso o presentaciones en programas de televisión, como este que subí del show del recién fallecido Tony Wilson; me pregunto ¿por qué fueron tan importantes?

Seguramente no faltara el que argumente, tal vez con razón, que es por que el vocalista se suicido, lo mismo paso después de la muerte de Kurt Cobain, la fama de su banda se multiplico por el planeta como una pandemia y sería muy extraño conocer a un occidental de menos de 35 años que no sepa quienes fueron los Nirvana.

Al parecer, el tema del suicidio que llevó a Albert Camus a escribir en uno de sus mejores pero más desconocidos libros, "El mito de Sísifo": "no hay más que un problema filosófico verdaderamente serio: el suicidio. Juzgar que la vida vale o no vale la pena de que se la viva es responder a la pregunta fundamental de la filosofía", cuando uno es adolescente parece sumamente relevante y lejos del lado morboso, la búsqueda de sentido existencial que caracteriza a esa etapa de la vida y a esta época vacía, hacen que a veces se confunda a este acto en que se sublima lo absurdo en una especie de exaltación épica y casi heroica, de rebeldía contra la vida y la sociedad. De acuerdo, cuando uno es adolescente es un poco idiota, pero ya hace rato deje atrás la adolescencia y siempre vuelvo a escucharlos y no solo son relevantes en mi vida, mis amigos siempre vuelven una y otra vez a perder el control en sus "placeres desconocidos*". "Unknown pleasures" primer disco editado de la banda.

Sin embargo, y dejando de lado los argumentos históricos que se pueden bajar de wikipedia, sobre el post punk, la revolución musical del 77... bla,bla,bla - típica conversación de bar porteño- .Lo importante es que el sonido de Joy Division hipnotiza, el ritmo repetitivo de la batería lleva a estados que ninguna otra música por muy ambient o concreta que sea, puede lograr. Es la magia de lo repetitivo, de lo simple, de un arte sin aspavientos. Humano, podríamos decir, o quizás no, por que los humanos somos pretenciosos y complejos, la música de esta banda tiene rasgos de esencialidad, de sentido. Me conectan con mi pasado, con el presente y el futuro que a pesar de las letras melancólicas y los acordes menores me alegran el espíritu.

Es extraño hablar de sentido si seguramente Ian Curtis se suicido por que era eso lo que le faltaba. Tal vez, debió escuchar un disco de su banda en vez de poner el "The Idiot" de Iggy Pop. O quizás le hubiera bastado con mirar por la ventana y ver caer la lluvia, escucharla. Son esas cosas pequeñas las que llenan. Grupos que tocan en lugares minúsculos y para poca gente; sonidos repetitivos, hipnóticos como un mantra que convierte hasta la rutina más despreciable en una experiencia maravillosa.
(les dejo el myspace de Javier: www.myspace.com/zapataglisser )